Doña Celmira, era la madre del colega Comunicador Social – Periodista, Octavio Vera Barranco.
“Madre mía, creo que no era el momento de esta dura despedida, sin embargo la voluntad de Dios es perfecta y así lo decidió, le doy gracias al Padre Celestial por haberme bendecido con una madre como tú, llena de virtudes y siempre dispuesta a cumplir ese rol divino”.
“Aunque la tristeza invade mi alma, al mismo tiempo una gran felicidad se apodera de mí por el privilegio que Papa Dios me concedió de ser tu hijo”.
“Gracias mamá, sólo eso puedo decirte, gracias por tanto”.
Descansa en paz.
Las exequias se llevarán a cabo en la funeraria Santa Marta.
Hora del sepelio: 4 de la tarde.