Después de casi dos décadas brindando atención especializada a recién nacidos, la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatal (UCI) de la Fundación Policlínica Ciénaga cerró definitivamente sus puertas. Desde su apertura en 2006, esta unidad atendió a más de 8.000 neonatos, convirtiéndose en un servicio fundamental para la salud infantil del municipio y de la región.
El incumplimiento contractual por parte de la Fundación Policlínica Ciénaga fue el motivo que llevó al cierre de la UCI neonatal. Este hecho representa un alarmante retroceso en el sistema de salud del municipio, ya que era la única unidad de cuidados intensivos neonatales disponible en Ciénaga. Su desaparición deja en situación de vulnerabilidad a cientos de familias de bajos recursos, no solo del municipio, sino también del departamento del Magdalena y de la región Caribe, que dependían de este servicio especializado para la atención médica urgente de sus recién nacidos.
La comunidad y el personal médico han expresado su preocupación ante esta pérdida significativa, señalando la urgencia de que las autoridades locales y departamentales tomen medidas para restablecer un servicio vital que durante 19 años fue sinónimo de esperanza y vida. Mientras tanto, los casos que requieran atención neonatal intensiva deberán ser remitidos a centros hospitalarios en otras ciudades, lo cual representa un riesgo adicional por los tiempos de traslado y los costos asociados.
El cierre de esta unidad no solo marca el fin de una etapa en la historia de la salud pública en Ciénaga, sino que también pone en evidencia la necesidad de mayor compromiso y vigilancia en la gestión de los servicios médicos esenciales.