En la mesa de trabajo desarrollada en la mañana del viernes 24 de marzo, en la avenida Donado la mayoría de comerciantes coincidieron en que debe autorizarse una ampliación del horario nocturno por parte de las autoridades competentes.
Asegura uno de los administradores de este tipo de negocios que las ventas inician a las 10 de la noche promedio y a la una (1) de la mañana se ven obligados a cerrar por disposición administrativa, sin lograr en ocasiones las ganancias para subsistir.
También indicó que se hace necesario un compás de espera para realizar los trámites de los documentos exigidos por las autoridades. Se comprometen a bajar los decibeles de sus equipos de sonido durante los fines de semana, para no afectar la tranquilidad de sus vecinos en sectores residenciales.
El inspector único de policía Wilmer de la Hoz Melo, presente en la reunión, explicó que su despacho comenzará a proyectar los actos administrativos para definir si se les levanta la sanción o no, a los establecimientos sellados el fin de semana anterior.
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