Adissa Acosta, explica que aún cuando se expidió una orden por parte de la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios para que la empresa Air-e retirara unos valores acordados con la extinta Electricaribe, siguen haciendo caso omiso a la orden dada y “torturan” recurrentemente a la usuaria con las cuadrillas de corte, en el inmueble ubicado en la calle 14 No. 17-81, barrio Centro.
Asegura que se presentan a cualquier hora, en la mañana, en horas de almuerzo, y no reconocen la resolución de la Súper revocando la decisión administrativa proferida por Electricaribe, ordenando retirar del contrato los valores asociados a los acuerdos de pago celebrado con la señora Gloria de Acosta Constante.
Según expone la ciudadana afectada, la empresa Air-e de manera unilateral en vez de cumplir la decisión del órgano de control, canceló la matrícula o NIC para el que se ordenó liberar la deuda y creó una matrícula o NIC nuevo, trasladando los valores a este suministro, para supuestamente hacer creer a la Superintendencia que ya cumplió con lo ordenado.
“La empresa Air-e es una república independiente, sin que nadie los supervise, sin que nadie los sancione, estos vinieron peor que Electricaribe”, advirtió la ciudadana.
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